“POBRE MAESTRA” - Autor: ALICIA SERRATO CASAS

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ALICIA SERRATO CASAS

Nació en Súchil, Dgo., el 12 de junio de 1926.

A la fecha es maestra jubilada.

 

“POBRE MAESTRA”

¡Pobre Maestra que impotente lloras

lo inútil de tu noble esfuerzo!

Que doquiera vas tus horas

dedicas al zagal perverso.

Le infundes con pasión cariño

y amor a todas las cosas,

mas a pesar de eso el niño

suele matar mariposas

Si lo invitas a apreciar

los seres de la creación

con celo suele ocultar

la hondilla en su pantalón.

Tú le dices la verdad

y le explicas la razón

que es muy mala la crueldad

porque seca el corazón.

Que es muy buena la nobleza

y necesaria la piedad,

que todo el mundo es belleza

cuando existe caridad.

En tu afán le implicas

la buena senda a seguir:

“si un animal mortificas

dolores le harás sentir”.

“Tú tienes hermoso can,

en tu casa yo lo vi

cuídale tú con afán

que siempre vela por ti.”

“Si el campo frutos te da

de singular sabrosura,

conserva el tallo en que está

evita la travesura.”

“La zorra sagaz que corre

a través de los breñales

sin duda su grey socorre,

—sus hijos—, por más señales.”

“Su camino no interrumpas

que ella una familia tiene,

quita a su paso las trampas

y dicha a su nido lleve.”

“En el fresco amanecer

con sus alegres piares

te despiertan con placer

pajarillos a millares.”

“No las hieras por placer

no des fin a su existir,

antes dales de comer

que nada hay como el vivir.”

Mas ¡Oh, realidad absurda!

tristeza fatal te agobia,

cuando nunca en mente burda

pudiste erradicar la fobia.

¡Qué vano ha sido tu empeño,

sembrando amor y nobleza!

Viviste de amor un sueño,

donde sólo había torpeza

Mas oye bien que te digo:

el fracaso no aniquila,

si llevas siempre consigo

la esperanza en tu pupila.

De encontrar ahí perdido

el corazón que responda

a lo que siempre has pedido

en ansiedades de fronda.

Consuélete dar amor

al animal desvalido,

ya verás que sin temor

te vivirá agradecido.

Dale amor al agua clara,

dale amor al Cenagal,

dale amor a un flor rara,

dale amor al pedregal.

Sigue siempre los dictados

de tu amante corazón,

ya sabrás los resultados

nunca dejan desazón.

Sólo siempre, no lo olvides,

prodiga de amor destellos

a marchitos nomeolvides

destrozados por aquéllos.

Por aquéllos que inconscientes

por norma llevan maldad

despreciando así imprudentes

tus consejos de bondad.

Yo como tú, también siento

que en esta vida es errar

del que piensa que con tiento

maldades irá a desterrar.

Mas no dejes de sembrar

allá muy de vez en cuando,

¡Pobre Maestra! al pasar

tus semillas ve regando.

Diciembre 23 de 1970

 

Tomado del libro Compositores del Valle de Súchil de Don Martin Martinez(QEPD)

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